Cocinas abiertas

No puedo negarlo, soy una gran amante de las cocinas abiertas. El salón y la cocina son los espacios en los que más tiempo pasamos, por lo que compartir espacio para ambos es una opción perfecta para disfrutar al máximo de nuestro hogar.

Siempre suelo decir que tiene muchísimas ventajas: cocinar y observar a tu hijo mientras juega en el salón, mantener una conversación con tu marido sin necesidad de hacerlo a gritos, o bien preparar algo para picotear sin que te pierdas la mitad de la conversación de tu visita… Un solo espacio donde te pasas gran parte de tu día tiene que servirte para sentirte cómoda y que sea totalmente funcional. Además, abrir espacios es fantástico cuando quieres generar una percepción de amplitud y dar rienda suelta a la imaginación para jugar con el diseño de todos los elementos.

Ahora bien, ¿qué miedos suelen aflorar cuando propongo este tipo de cambios? Son muchos los que me trasmiten su preocupación por el hecho de que el olor de la cocina llegue a zonas del salón con más facilidad. Y, por supuesto, ¡tenemos la solución! En este sentido, comprar una campana de cocina de calidad será la solución a todos estos problemas.

Muchos de mis clientes ni se habían planteado abrir sus cocinas. Y ahora, todos ellos me dan las gracias por haberles animado a ello. Si abres tu mente, ¡probablemente también quieras abrir tu cocina!